¿Por qué mis hijos se portan asi?

«…Una mamá ya muy cansada dijo:

• Todo el día es un pleito en casa ¿Qué hago? Mi hijo tiene tareas y no las quiere hacer?
• Insístale que la haga, que es su trabajo.
• Se lo digo una y otra vez, pero no me hace caso – respondió con voz de derrotada.
• ¿Cuántos años tiene el niño? – le pregunté.
• Seis años, está en primer grado. – dijo ella.

¿Les ha pasado?

Año Nuevo, nuevos propósitos y entre ellos tratar de ser más tolerantes con los hijos, porque en medio de esta pandemia tenemos que estar todo el día juntos, además de tener que sobrellevar las clases en línea desde casa. Lo que debería ser un tiempo agradable en familia, se convierte en una tarea complicada cuando en la convivencia diaria y no se ponen límites.

Conflictos así se están viviendo porque los padres de familia se muestran temerosos o apáticos para ejercer su autoridad, eso da como resultado que sus hijos crezcan y el problema junto con ellos, ya que a esos padres les cuesta trabajo tomar la decisión de poner límites y ejercer su autoridad de forma correcta.

¿POR QUÉ TUS HIJOS SE PORTAN ASÍ?

1.- PORQUE TÚ LOS DEJAS: Tus hijos hacen lo que hacen porque tú como papá o mamá se los permites. Los hijos se convierten en lo que son, porque sus padres se los permiten, así de sencillo. Si tu hijo está haciendo un desastre de su vida, es porque tu como padre se lo estás permitiendo. Puedes dar todas las excusas, culpar la música que escucha, las películas que ve, los libros que lee (si es que lee), la violencia de la televisión, el sistema educativo, la presión que ejerce la sociedad o a sus amigos, etc; así es que deja a un lado la indignación y piensa: tus hijos son producto de tu manera de educarlo.

2.- CUANDO NO HAY CONSECUENCIAS POR SU MAL COMPORTAMIENTO: Los padres dejan hacer a sus hijos lo que quieran, no les dicen lo que es aceptable y lo que no lo es. Si ellos hacen algo mal, no hay consecuencias por el inaceptable comportamiento.  Algunas veces decimos: “Si haces esto te va a pasar aquello», y «si no haces aquello te va a pasar esto», después ellos no hacen lo que tienen que hacer y no pasa nada, no cumplimos la promesa de las consecuencias advertidas.

Un padre que no cumple con las consecuencias advertidas, para su hijo se convierte en un MENTIROSO; y eso justamente aprenden nuestros hijos, a mentir, y a prometer sin cumplir, al fin que no pasa nadA.

3.- CUANDO DICES A TUS HIJOS QUE SON ESPECIALES: Si tú eres de los que cree que su pequeño ángel es especial, lamento decirte que no lo es; si tú les dices a tus hijos constantemente que son especiales, los perjudicas más que ayudarlos. Tu hijo es especial para ti y solo para ti, no lo es para nadie más.  Tu hijo nació con todo tu amor y verlo crecer es toda una maravilla, sin embargo, cuando crece y cruza tu puerta para ir a la escuela, solo es un niño más en la lista de su grupo, y no hay nada de especial acerca de él. En el mundo real, tu hija no es una princesa, ni tu hijo un príncipe, sólo es un niño más.  Los hijos deben entender y aprender a crecer sabiendo que al instante que dejen tus amorosos brazos y entren al mundo real, nadie los amará por la única razón de que ellos existen, como lo haces tú. (Quizá no estarás de acuerdo con esto, a mí también me resultó difícil entenderlo y aceptarlo, pero es una realidad).

4.- CUANDO NO LES ENSEÑAMOS LA DIFERENCIA ENTRE DERECHOS Y PRIVILEGIOS: Los hijos tienen los siguientes derechos: a la vida, a jugar, a la libertad de opinar, a una familia, a la protección contra el trato negligente, a la alimentación, a ser amados, a recibir educación, etc.

Los privilegios son concesiones ganadas por una acción determinada; muchas veces compramos a nuestros hijos: lo más actual en videojuegos, ropa o zapatos de marca, una mascota, e incluso los llevamos al cine o a vacacionar, les compramos celulares, etc, etc. y todo gratis, a cambio de nada.

Esto es muy importante: Aunque te sobre el dinero para complacer a tu hijo, tienes que enseñarle a ganárselo; él tiene que saber que las cosas que le gustan, cuestan y hay que pagar un precio por ellas. Incluso estas cosas te ayudarán en la negociación de actitudes y comportamientos.

Quizá estos no sean de tu total agrado, sin embargo, al iniciar un nuevo año, piensa en que lo que siembres en la mente de tu hijo, será lo que cosecharás desde este tiempo con su comportamiento y sus actitudes.

Como papá o mamá, tienes una enorme riqueza al poder disfrutar a tus hijos, ¿necesitas hacer cambios? Hazlos ahora, si tienes que tomar tu autoridad como padre, tómala y ejércela, a fin de cuentas, quien batallará con tus hijos o disfrutará de su buen comportamiento y de sus logros serás tu como padre.

“Instruye al niño en su camino, y aun cuando fuere viejo no se apartará de él” Prov. 22:6