Madurando y anhelando la ternura de Dios podemos convertimos en una persona, afectiva, social, con capacidad de amar, de servir, con valores morales, éticos y religiosos, a través de la FE descubrimos nuestra trascendencia, y si cultivamos nuestra espiritualidad nos da paz, nos eleva y ennoblece, aceptando nuestra naturaleza y dignidad humana hemos de custodiar la vida y la dignidad propia y la de los demás.
La Cultura actual está en contra de la vida, nos confunde y manipula con ideas desconcertantes que van en contra de la Verdad y de la Ciencia, es muy triste.
Hagamos cumplir la voluntad de Dios, levantemos la voz y detengamos a quien quiera truncar la vida de un nuevo ser humano que nuestro Creador a enviado para realizar una Misión específica.
Es fundamental el acompañamiento en este proceso de la defensa y protección de la vida humana en todas sus etapas, hasta la muerte natural, juntos y unidos lo podemos hacer.
Puedo decirte “Tu eres UN MILAGRO, tu vida es la mayor riqueza, el tesoro y orgullo de Dios. Nadie te la puede quitar” por esta verdad nosotros no tenemos ningún derecho de decidir el quitar la vida de otro ser humano.